Brasil es el quinto país más grande del mundo, ocupa más de la mitad de la masa terrestre de Latinoamérica. Es también el caso cuando decimos que Brasil es una fuerza grande en la industria global, muy prevalente al hablar sobre la producción de aluminio primario, ya que se encuentra en el octavo puesto del ranking mundial debido a la cantidad que producen, y, por lo tanto, muestra un mercado que valdrá la pena investigar detalladamente. En términos de los sectores predominantes de la economía brasileña, la minería y la fabricación se encuentran en esa categoría. Por consiguiente, si querés convertir algunos bienes capitales a inversiones en nuevos mercados, tras la pandemia de COVID-19, tal vez la industria brasileña de aluminio sea ideal para vos. En el artículo de hoy, no daremos ningún consejo financiero, sino que vamos a explorar el mercado de la nación latinoamericana, además de unos beneficios potenciales que podrían producirse con tu inversión.
Es posible que no estés familiarizado con esa industria o la definición de la producción de aluminio primario ¡que no cunda el pánico! Antes de entrar en detalles técnicos, vamos a empezar con un esquema de todo esto:
La producción del aluminio primario se define como la obtención del aluminio desde células electrolíticas mediante el proceso de reducción electrolítica del óxido del aluminio. Esa definición puede ser bastante difícil de entender, y, de hecho, el proceso es complicado. Sin embargo, en términos más sencillos, significa la producción del metal de aluminio de forma pulverizada gracias a una reacción química.
Podemos ahora investigar un poquito más sobre la industria, empezando con los productores latinoamericanos más grandes de aluminio primario, ya que a lo largo de los últimos años ha sido un mercado dinámico. En el pasado, Venezuela llevó la corona para este título, sin embargo, con las implicaciones económicas grandes de la industria de producción de aluminio, la nación no pudo mantener su posición. Esto dejó un hueco que llenaron, tanto Argentina como Brasil que actualmente lideran este mercado. La lista de los tres productores más grandes de la región, a partir del comienzo del 2021, destaca a Argentina y a Brasil, uno de los cuales se llama la Companhia Brasileria de Aluminio (CBA), y será importante en el artículo que hoy compartimos con ustedes.
Una de las cosas más importantes a considerar son los números. Es decir, las condiciones actuales del mercado y proyecciones futuras, en 2019, el mercado de aluminio brasileño llegó a US$2,2 mil millones. Esa valoración muestra el potencial que existe en esa área, y está reforzada por la estimación del mercado de US$4,1 mil millones en 2027, casi el doble en menos de una década con una Tasa de Crecimiento Compuesto Anual (CAGR) de 4,4%. Esa expansión del mercado puede ser atribuida a varios factores, inclusive una demanda mayor y también el desarrollo que tiene lugar de los sectores de industria en Brasil.
Para un posible inversor, la información antedicha presenta una situación interesante, la cual muestra un paisaje ideal para recibir buenos rendimientos. Al mismo tiempo, es importante tener en cuenta el efecto de la pandemia de COVID-19 y mirar hacia un largo plazo en la industria de producción de aluminio primario en Brasil, porque la situación actual puede no reflejar el potencial de desarrollo que podría ocurrir tras el fin de los confinamientos y la accesibilidad de las vacunas.
Uno de los factores a considerar cuando buscás invertir en el futuro, es la sostenibilidad. Acabamos de mencionar la dominación venezolana del mercado aluminio latinoamericano que terminó cuando las implicaciones económicas imposibilitaron que este país lo mantenga, y también que la producción del aluminio requiere mucha energía. Hay que tener en cuenta que la sostenibilidad podría ayudar con dichos problemas, y que Brasil ya está involucrado con intentos para mejorar el proceso de producción. La empresa CBA es el epítome de esto, porque no es solo uno de los mayores productores de aluminio primario en Latinoamérica, sino también busca ser ecológico. Se han comprometido a una ‘meta con base científica’ para limitar el calentamiento global a 1,5°C. Para una empresa que produce 480.000 toneladas de aluminio por año y cuida cada paso del proceso de producción, es una noticia bien acogida. También generan su propia energía y usa reciclaje industrial, lo que hace a CBA un potencial modelo a seguir para otras empresas en Brasil y el mundo y ademas ayuda a atraer más inversiones.
¡Si querés saber más, contáctanos hoy! En Creimerman, nuestro equipo de ciudadanías globales profesionales estará más que complacido en ayudarte con tu actividad transfronteriza personal o profesional con los medios necesarios para su éxito.