A la hora de invertir en bienes raíces, hay algunas claves con la que hay que contar para lograr una inversión óptima en Argentina.
Antes de realizar la inversión es necesario realizar un estudio de mercado y el lugar de ubicación. Este primer paso es tan importante como elegir el tipo de inmueble. El territorio argentino es muy grande, se puede elegir invertir en el medio de la ciudad teniendo en cuenta el turismo, como en uno alejado de ella donde solo abunde el verde para un espacio de relajación. Además es necesario preguntarse ¿Qué servicios públicos llegan?, ¿Qué servicios de transporte hay cerca?, ¿En 10 años esta zona tiene potencial de crecimiento o ya está en su máximo? También es importante resaltar las oportunidades en zonas que todavía no han sido explotados, lo que permite una compra más económica y una venta a futuro, con un valor mayor y rédito.
El siguiente paso es definir el tipo de propiedad en los que se encuentran los Residenciales (terrenos sin desarrollar, casas, condominios) Comerciales (edificios de oficinas, almacenes, edificios de locales comerciales) y los Industriales (fábricas, minas, granjas). Desde hace algunos años, el fideicomiso es el marco más utilizado para la comercialización de nuevos emprendimientos inmobiliarios, una tendencia que hoy se mantiene vigente.
Los departamentos de pozo suelen ser también una interesante oportunidad a la hora de adquirir un inmueble como inversión. Con un valor de $700 dólares por metro cuadrado, un valor bajísimo, sumado a las oportunidades de crédito que constantemente ofrece el gobierno. Una oportunidad única ya que los materiales de construcción, y sobre todo en el interior de la Argentina, no son costosos.
Por último el negocio de la compraventa de cocheras las hace muy rentables, sobretodo en el ámbito de la Capital Federal, en las cuales son muy demandas. Al mismo tiempo permite a los inversores, que no cuentan con suficiente dinero para adquirir un departamento, resultando la cochera en una excelente alternativa.
Nuevos barrios de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, están floreciendo, con nuevas construcciones donde el flujo migratorio, encantado por la calidad de vida y la ciudad cosmopolita, decide invertir en ella y quedarse a vivir en ésta Argentina que promete cada día más.